Organizaciones Cooperativas |
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La historia, que también lo es de las mujeres, ha ocultado a las mujeres, no digamos pues, al pensamiento feminista
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UN ESPACIO PROPIO Y COLECTIVO: LAS TERTULIAS DE AMECOOP Por Helena González Domínguez, colaboradora de AMECOOP “(...) Cuando salí de casa de Louise y cogí el autobús de zoo estaba lloviendo. El autobús estaba lleno de mujeres y niños. Mujeres ajetreadas y cansadas calmando a niñ@s malhumorados y excitables. Un niño la metido a la fuerza la cabeza a su hermano en la cartera tirando todos los libros al suelo y enfureciendo a su madre hasta ponerla al borde del asesinato. ¿Por qué no se incluye todo este trabajo en el Producto Nacional Bruto?- porque no sabemos cómo cuantificarlo, dicen los economistas. Deberían coger un autobús (...)” Jeannette Winterson 1. Hoy es viernes, reunidas en torno a una mesa de "Subiendo al Sur", junto a un buen café, calentamos el ambiente con las noticias de actualidad, cursos de género, manifestaciones, jornadas... Milú, introduce el lema de hoy "Los Retos del Feminismo", inspirándose en un texto de Amelia Valcárcel, que previamente hemos leído todas de un modo significativo. Comienza la tertulia teñida de opiniones, críticas, reseñas históricas, que van envolviendo el ambiente en una apasionada conversación. La mesa tertuliana, aún con aroma de café, se va tornando en paleta de pintora y adopta tonalidades y matices morados y celestes, un celeste feminista. De esta forma, una vez al mes, un grupo de mujeres participamos, hace ya más de un año en la tertulia, ahora seminario, sobre género feminismo que promueve AMFCOOP. Recuperar el formato tertulia, como un verdadero espacio, de participación de mujeres ha sido un placer y ha supuesto un buen instrumento de contraste colectivo con el que muchas de nosotras hemos descubierto, hemos aprendido el Feminismo. Sesión a sesión hemos trazado clases conceptuales tales como género, patriarcado, igualdad.., y rescatado clases históricas que han conformado y construido gran parte de lo que es hoy la ideología feminista: desde el feminismo ilustrado como filosofía política, siguiendo la segunda ola del feminismo liberal del siglo XIX, la misoginia romántica, las sufragistas, la tercera ola del feminismo sesenta y ochista, para adentrarnos ahora en las tendencias y los retos del feminismo del siglo XXI. Explorar y sumergirnos en textos claves de la historia feminista, esa historia, que es también la nuestra, la de las mujeres nos abre un enfoque nuevo, el de género, aún oculto en nuestro sistema educativo político, social y económico, elevando el valor actual de lo que significa ser feminista; La reflexión histórica se vuelve imprescindible para identificar lo que significa el feminismo hoy, apoyado en una base, no por desconocida y desprestigiada en ocasiones, menos sólida y labrada a pulso desde las mujeres. Emerger el pensamiento feminista, a golpe de viernes, es disfrutar de una nueva perspectiva, de la que no tuvimos consciencia, al menos conciencia crítica, cuando estudiábamos la Historia con mayúsculas, la que nos enseñaron en la escuela y permanece en los libros de texto inmóvil, casi inalterable. Casi me atrevo a afirmar, que una perspectiva de género de la Historia con mayúsculas; cambia la propia historia, no sólo el punto de vista; porque la historia, que también lo es de las mujeres, ha ocultado a las mujeres, no digamos pues, al pensamiento feminista. La propia base del estado moderno se puede tambalear cuando, al analizar su esencia, por ejemplo: los más puros principios y valores democráticos que defendía la revolución francesa como la igualdad de derechos, empezando por el sufragio universal, como una forma de expresión de la soberanía popular, dejaba fuera, sin ninguna duda a las mujeres la única minoría mayoritaria). El sufragio universal no fue tal hasta muy avanzado el siglo XX. Es terrible comprobar cómo la historia está teñida de sexismo y es el feminismo la ideología que viene a vindicar el valor de las personas como seres humanos, poniendo en cuestión al mismísimo Rousseau, que dejó fuera del pacto social a las mujeres. Pero actualmente resulta irritante, no sólo la negación universal de las mujeres en la Historia, sino que la propia condición femenina sea aún un atributo sesgado de la condición de ser humano. La historia, la de los libros, la del poder, la de la vida pública, ha sido protagonizada, escrita y opinada por los varones. Sabemos que el sufragismo ha nutrido al feminismo en el siglo XX, fue un objeto de lucha universal de las mujeres, conseguido, en muchos casos, hacia la segunda mitad de siglo. Digámoslo bien alto y bien claro: la democracia moderna, desde una perspectiva de género, nace desde un concepto de lo que podríamos llamar androcracia, democracia patriarcal practicada, impuesta y legitimada por la ideología del poder. Pero no se trata ni mucho menos de analizar aquí y ahora el contenido de las tertulias, sí de transmitir su espíritu y su continuidad como un espacio actual de profundización en el género. La tertulia se ha ido transformando en seminario, no sólo porque aumenta la participación de mujeres, sino porque se ha invitado a feministas expertas en diferentes ámbitos, laboral, económico, social... para adentrarnos en el análisis de la situación de las mujeres en la actualidad. Para ello contamos con la participación de mujeres como Milú Vargas, Cristina Carrasco, Marcela Lagarde, Rosa Cobo, Hilary Rolling, Mercedes Larrañaga... Para nosotras y desde nuestra condición de género, aprender y aprehender EL FEMINISMO, desde sus raíces históricas, fue un objetivo a priori, motivador y es ahora un resultado conseguido, generador de otros objetivos como reactivar el feminismo, al menos desde nuestra humilde condición de mujeres militantes, manifestarlo en compromisos concretos, actualizarlo creando un discurso propio como mujeres cooperativistas. En eso estamos, ese es el reto ahora. 1 Tomado de su novela “Escrito en el cuerpo" 2 Subiendo al Sur es el nombre de un restaurante bar y tienda de comercio justo gestionado por una cooperativa de Madrid.
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